LONDRES / 2016

"Y llego el día, el de todos los días, el día menos pensado, el día que sucedió lo imprescindible. Londres renació en la pirámide del Shincal, en tres dimensiones. Pasado. Presente. Futuro. Para fusionar los fallos del destino."

Londres.

“A veces dejar de creer o de entender algunas cosas es un gran alivio para la razón”

Londres.

"El tiempo tiene el arma perfecta contra nosotros. No son las arrugas, ni lo achaques físicos, ni enfermedad alguna. Su as en la manga, en el juego de la vida, es la vulnerabilidad que vive en cada uno de nosotros".

Londres.

"Hay vidas que transitaron mí camino, las quiero presente, siempre a mi lado, aunque no estén, combatir a la memoria cuando se quiera perder en el espejo del destino, batallar codo a codo con el recuerdo, por si se pone olvidadiza de esas personas que fueron y son parte de mí. Los recuerdos son los mejores aliados para guerrear al olvido.”

Londres.

"Podes resistir o podes acompañar los cambios porque en un mundo de contraste, como es el mundo en que vivimos, no hay nada que te haga sufrir más que resistir lo que sea."

Londres.

"Porqué no conceptuar que es posible compensar el pasado en el presente y perfeccionar nuestro futuro. El tiempo es un viaje inmaterial que vive en nuestra reminiscencia."

Londres.

El hundimiento del ARA General Belgrano se produjo el día 2 de mayo de 1982 a las 17:00 horas y fuera de la zona de guerra establecida.

Londres.

"Algunas de estas llaves nos lleva a ese momento. No tenga miedo Capitán, las ruinas del Shincal nos protege, Londres nos cuida. Emmanuel nos espera"

Londres.

  

 

"La soledad la trasladó a vivir a este pueblo."

"Me trasladó para que usted me encontrara. Se da cuenta, a veces la soledad no es mala. Pero tenga cuidado, es un poco celosa."

Londres

“No sirve de nada volver al pasado. Lo que hicimos bien o mal, hecho está. Estamos más próximos, a esa puerta, al futuro y dejar este destino y comenzar una nueva vida. Piénselo y me dará la razón. La vida no es esto. Sería subestimarla hay algo mas allá de esa puerta. Y no es el pasado.”

Londres.

Llegue aquí a Londres en busca de un espacio. Lo encontré. Aunque siento que no estará consumado el círculo, si usted no me acompaña al Shincal.
Usted también necesita interceptar su círculo.
Y ese círculo es la ciudad. Ni usted ni yo volveremos a la ciudad.
Porque no estamos dispuestos a negociar nuestra libertad.

Londres.

Me quedaría por un buen tiempo, un largo tiempo, por un siempre jamás.

Londres.

El hombre se acostumbra a cualquier cosa. Es la vida.

Londres.

Están aminorados, horrendos hasta una escueta pluma, favorecida por una sutil brisa, sabrá hacerlos caer.

El pasado, el presente, el futuro. Aquí y ahora. Todo está sucediendo en este mismo momento. Así es Capitán. Necesitamos beber el cebil en la noche de Inti Raymi. Y solo pensar. Einstein y el Shincal.

Londres.

Es mejor guardar algunos secretos, hacen menos daño cuando se esconden.

Londres.

El sublime fracaso de la muerte, es el alma valiente que renuncia a su cuerpo en plenitud. 

Londres.

"La mujer le acerco una botella al Capitán. Y este le pregunto ¿Que es?. Ella respondió: Me la dio hace un tiempo Don Urbano. Es un preparado de los cardones incas. Pero esa bebida es alucinógena, dijo el Capitán. Si lo es, le respondió ella y continuo: Es lo natural para que nos ayude en la teoría de la relatividad."

Londres.

Albert Einstein y la Teoría de la Relatividad me están llevando a Londres, 14 horas (1.316,4 km) por Au. RN 9 y RN 60

Don Urbano.- Imperturbable noche lunera de yermos en los cerros. Todos dicen ruinas. Ruinas, palabra mal entonada para cualquier cancionero popular y lugareño. Para mí son piedras, preciosas, piedras que no son de esta tierra. Piedras preciosas del Shincal. Que encandilan y trasmutan el espacio una y otra vez. Están por allá… pero también a unos cuantos pasos de aquí. Es asunto dejarse iluminar por la luna de los cerros, noche limpia y de estrellas. Fría. Y el Schincal te acarrea, te corteja.

Falucho deja de ladrar. ¿Ves animas? Déjalas pasar. Son Incas en su último camino hasta las piedras, se pierden, se desorientan. No entiende que el mundo es otro y no aquel de devociones celestiales.

Falucho vamos para la casa. Y dejamos descansar al Schincal.

"Ahora de que nos sirve nuestra verdad. Cuando ya paso el tiempo. 

Cuando ya ni siquiera podemos utilizarla ni para perdonar al destino."

 "No nos dijimos adiós de común acuerdo. Yo sé que fue la vida."